Los rendimientos de capital mobiliario son uno de los tipos de rentas del ahorro dentro del IRPF y abarcan los intereses de cuentas bancarias, bonos, obligaciones y la mayoría de títulos de renta fija, así como los dividendos de acciones o el tipo de interés percibido por préstamos y créditos.
Los rendimientos del capital mobiliario se integran en el IRPF con las ganancias y pérdidas patrimoniales para tributar según la escala del ahorro.