Te contamos varias formas de reducir el presupuesto del supermercado y ahorrar en la compra:
Compra en el supermercado más barato
Según un informe de la OCU, la diferencia entre hacer la compra en el supermercado más barato y en el más caro es de 994 euros al año. Esta cifra se triplica en algunas ciudades como Madrid, donde la diferencia es de 3.529 euros al año.
Por el contrario, en Cuenca, Segovia y Pontevedra elegir el supermercado más barato apenas supondrá 520 euros al año.
¿Y cuáles son esos supermercados más baratos? La lista varía según cada ciudad, pero según los datos de la OCU, las cadenas con precios más asequibles serían: Tifer, Dani, Family Cash y Alcampo. Entre las que operan a nivel nacional, además de Alcampo, estarían Lidl, Mercadona y Carrefour, en ese orden.
Elabora un presupuesto con cuánto quieres gastar
¿Quieres mantener a raya el gasto en el supermercado? Elabora un presupuesto y decide cuánto vas a gastar en alimentación cada mes.
Lo idóneo es que revises cuál ha sido tu gasto en los últimos meses y ajustes la cifra con éste en mente. Como ocurre con el ahorro mensual, no es recomendable pasar de 0 a 100 en poco tiempo porque acusarás mucho ese cambio y es fácil que termines saltándote el presupuesto inicial.
Haz una lista de la compra
Uno de los trucos más útiles para gastar menos en el supermercado es tener una lista de la compra que incluya lo que vas a comprar. Así evitas las tentaciones de las que están plagadas los supermercados.
Además, esta forma de hacer la compra también te ayudará a llevar una alimentación más sana, si quieres. La razón es que la mayoría de compras no planificadas en el supermercado están relacionadas con caprichos y alimentos poco recomendables.
Compra marca blanca
Un consejo clásico para ajustar la lista de la compra y que cada vez tiene más peso. Y es que, la subida de precios ha disparado el consumo de marca blanca.
Según un estudio de NielsenIQ, la compra de marcas blancas ha pasado del 39% de 2015 al 48% actual, después de subir su uso dos puntos porcentuales tanto en 2022 como en 2023.
Detrás de este aumento está un cambio de hábitos por parte de los consumidores y que cada vez son más los supermercados que apuestan por enseñas propias.
Utiliza cesta en lugar de carrito o el carro más pequeño
Puede parecer una tontería, pero tu cerebro está diseñado para llenar la cesta de la compra, da igual que sea un carrito, el carro pequeño o el más grande. Mientras veas huecos, seguirás pensando que hay espacio para seguir comprando. Es así de simple.
A esto se suma el hecho de que a nadie le gusta jugar al tetris con el carro. Antes de llegar a ese punto irás directo a caja para pagar.
Por eso mismo, ante la duda, elige siempre el carro más pequeño. Tu bolsillo lo agradecerá.
Compara el precio según su peso o unidad
¿Cómo puedes saber si un producto es más caro que otro? El secreto no está en el precio final, sino en el coste por kilo o por unidad, dependiendo del producto.
Así es como debes comparar productos si quieres escoger el más barato.
Compra a granel
En esta misma línea, los envases y productos más grandes tienden a ser más baratos. Comprar a granel es una buena forma de ahorrar en la compra.
Eso sí, evita caer en la trampa de comprar en exceso, sobre todo productos perecederos.
Paga en efectivo
Pagar en metálico es mucho menos cómodo que hacerlo con tarjeta, pero también es una forma de asegurarte que no gastas más de lo que tenías previsto y de ser más consiente de cuánto gastas.
Si prefieres no llevar el dinero en metálico, puedes usar tarjetas de prepago.
Adapta tu menú
Los alimentos frescos componen el grueso de la lista de la compra, más allá de productos de limpieza e higiene.
¿Quieres ahorrar en el supermercado? Adapta tu alimentación a los alimentos más económicos, aunque sin caer en excesos. No se trata de comer arroz y pasta a diario, sino de incluir más verduras en el menú, que tienden a ser más baratos que la carne o el pescado.
Y puestos a elegir, elige la fruta y verdura de temporada, que suelen ser más económicas y también más sostenibles desde el punto de vista medioambiental.
Haz platos más sencillos
Una extensión del truco de ahorro anterior: cocina platos más sencillos, que no necesiten tantos ingredientes y que sean menos exóticos.
No vayas al súper con hambre
Ir al supermercado con hambre hará que compres más comida para saciarla. Además, normalmente lo harás con comida menos saludable que cuando haces la compra con el estómago lleno.
Aprovecha las tarjetas de fidelización
El cashback es tu amigo cuando se trata de hacer la compra. Los supermercados llevan años premiando la fidelidad de los clientes y puedes aprovecharlo para pagar menos en la compra acumulando dinero en el cheque ahorro o con descuentos solo para socios.
También los cupones
Un complemento a esas tarjetas de fidelización son los cupones de las grandes marcas. Conscientes de que son más caras que la marca blanca, muchas cuentan con cupones de descuentos por comprar o probar sus productos.
Estos cupones pueden funcionar como un descuento directo en caja o una devolución una vez demuestras que has comprado el producto. Esta es una forma idónea para ahorrar sin renunciar a tus marcas favoritas.
Aprende a moverte en el súper
Por último, también puedes gastar mucho menos si aprendes a moverte en el supermercado. Hacerlo es más fácil de lo que piensas y se resume en cuatro consejos concretos:
- Ve primero a la sección de descuentos, no tanto para buscar gangas, sino para ver si alguno de los productos de tu lista tiene descuento.
- Mira arriba y abajo. Los productos con mejor precio suelen estar en los estantes superiores o inferiores. A nivel de la vista tendrás los que el supermercado quiere que compres, con los que más margen obtiene.
- Evita los pasillos interiores, salvo que tengas que comprar algo que haya en ellos.
- No sigas el itinerario que marca el súper, haz el tuyo propio.
Sigue estos consejos y lograrás reducir el gasto en el supermercado, y tu bolsillo te lo agradecerá a final de año.
