En este artículo te explicamos en qué consiste el cashback y cómo sacarle provecho sin caer en la trampa que supone.
Qué es el cashback
Podemos definir el cashback como un sistema gracias al cuál recibes un porcentaje del dinero que gastas al comprar determinados productos. En otras palabras, una fórmula con la que tiendas y entidades financieras consiguen que gastes más dinero y con el que tú, como usario, ahorras dinero en cada compra.
El cashback no nuevo. Es una herramienta que los supermercados llevan años utilizando. También es habitual verlo en tarjetas de crédito como un beneficio o ventaja añadida. Lo que ha cambiado ahora es que, gracias a la tecnología y las compras online, el sistema se ha vuelto más popular.
De hecho, hay navegadores como Ópera que lo ofrecen directamente y otros en los que basta con buscar una extensión de alguna plataforma de cashback para beneficiarse de él.
Cómo funciona el cashback
El funcionamiento del cashback es muy sencillo. En esencia, son sistemas con los que ingresas una parte del dinero que te has gastado. Así de sencillo.
Vamos a verlo con un ejemplo. Imagina que compras un móvil de 250 euros con cashback del 1,5%. Tendrás que pagar los 250 euros por el terminal, pero recibirás 3,75 euros a cambio.
A partir de ahí, existen dos modelos de cashback diferentes:
- Cashback en metálico, que se ha vuelto la opción más habitual. Con este formato, recibes el dinero que has ahorrado vía cashback en tu cuenta a final de mes. Eso sí, según la plataforma puede que necesites sumar cierta cantidad para que hagan el ingreso.
- Cashback en cheques regalo o puntos. Esta es la fórmula más habitual en supermercados con promociones que se acumulan en tu cheque ahorro (hay quienes no consideran esta opción cashback en pureza). También hay muchas entidades financieras y plataformas que la utilizan. Con ella no recibes el dinero del cashback, sino que esa cantidad se acumula en cheques regalo que después puedes usar para comprar en otras tiendas afiliadas a la plataforma o en puntos que puedes canjear por determinados productos.
Cuánto puedes ganar con el cashback
El porcentaje concreto de ahorro depende de cada plataforma, tienda y producto que compres. Al final, el cashback es una herramienta de promoción para marcas y comercios, por lo que aumentarán el retorno de los productos que están más interesados en vender.
El porcentaje que suelen devolver oscila entre un 1% y un 5% como norma general, aunque hay promociones especiales donde puede superar el 50%. Lo más habitual es que la devolución sea mayor cuando se hace en formato de cheque ahorro o puntos que en forma de dinero.
Ventajas y desventajas de los reembolsos en cashback
La ventaja de este modelo de compra está claro: puedes ahorrar un buen dinero en cada una de tus compras.
De hecho, usada con cabeza es una buena forma de ahorrar en el supermercado, por ejemplo.
Sin embargo, también tiene sus desventajas. Hay dos riesgos de los reembolsos en cashback muy claros.
El primero y más habitual es que puedes gastar más de la cuenta y en cosas que no necesitas. Confundir gangas con ahorro es uno de los fallos clásicos al ahorrar y el cashback es una forma de estimularlo.
Al final, es muy fácil comprar cosas que no tenías pensado solo porque te devuelven una parte del importe y así crees que estás ahorrando cuando no es así. También es habitual gastar más de lo que pensabas por ese reembolso. Así, en lugar de comprar el móvil del 250 euros puedes terminar con el de 300 euros y todo porque has visto que te devuelven un 5% del importe (15 euros).
Esto es algo parecido a lo que ocurre cuando financias tus compras, que terminas pagando más de lo que tenías en mente.
El segundo riesgo del cashback son las comisiones ocultas que incluyen muchas tarjetas de crédito que usan este modelo. Ahorrar un 5% está bien, pero no a cambio de pagar comisiones de mantenimiento, de tener que hacer un uso mensual mínimo de la tarjeta, de pagar un tipo de interés elevado o de mantener una tarjeta en modo revolving, por ejemplo.
Por eso mismo es imprescindible revisar las condiciones de la tarjeta y también del propio programa de cashback, por si incluye gastos mínimos para recibir el dinero, por ejemplo.