Se trata de la mayor cifra registrada nunca, que supera incluso a la de marzo de 2022, cuando aún se arrastraban los efectos de la pandemia de COVID-19 en la atención primaria. De ahí que cada vez más personas contraten seguros de salud privados para tener un extra de seguridad. Pero ¿qué tipo de seguro es el más conveniente? La primera gran decisión es determinar si el seguro será con o sin copago.
Ventajas del “sin copago”
En los seguros de salud sin copago, el asegurado paga una única cuantía, mensual o anual, y puede utilizar todos los servicios médicos que necesite. La principal ventaja de este tipo de seguro es que siempre se tiene la certeza de saber exactamente qué prima se va a pagar, ya que nunca se tendrá que hacer frente a ningún cargo adicional, si bien es cierto que la prima suele ser más elevada que en los seguros con copago.
Este tipo de seguro de salud sin copago es especialmente recomendable para personas que tienen la necesidad de acudir con bastante frecuencia al médico. Con una póliza sin copago, el asegurado no tiene que preocuparse de las veces que tenga que acudir a la clínica o el número de pruebas médicas que sea necesario realizarse, ya que la prima es única independientemente de estos factores.
Copago: menor precio
En el caso de los seguros médicos con copago, el cliente paga una prima más barata, pero a cambio se hará cargo de un porcentaje de lo que cuesten los servicios del cuadro médico. Esta cantidad se abona en el momento en el que el cliente utilice el servicio.
Una de las principales ventajas de los seguros privados con copago es que el precio de la prima es menor y al mismo tiempo, el importe que hay que pagar por cada cobertura es inferior a su valor real, ya que se comparte entre la aseguradora y el asegurado.
Los seguros médicos con copago sirven para concienciar a los clientes de hacer un uso responsable del sistema sanitario. Antes de contratar un seguro de salud con copago, es necesario asegurarse del precio de los distintos servicios que entran en el seguro médico, para luego no llevarse una sorpresa desagradable.
Hay que tener en cuenta que el precio será diferente en cada aseguradora. Lo normal es que las pólizas incluyan los límites anuales, lo que significa que, al llegar a esa cantidad, el cliente no tendrá que pagar más copagos en ese año, pero podrá seguir usando el seguro.