Para mayores y personas con discapacidad
No todas las personas pueden optar a esta fórmula: el titular de la hipoteca debe tener 65 años o más. También pueden disfrutar de una hipoteca inversa personas que acrediten un grado de discapacidad, igual o superior al 33 por ciento o dependencia severa o gran dependencia.
Funcionamiento
El funcionamiento de la hipoteca inversa es, como su propio nombre indica, lo contrario al de una hipoteca tradicional. En una hipoteca al uso, de las que se firman para adquirir una vivienda, el beneficiario del préstamo paga una cuota cada mes y va reduciendo la cantidad de dinero que debe a la entidad. En el caso de la hipoteca inversa, es la entidad la que paga al beneficiario hasta su fallecimiento, momento en el que sus herederos pueden decidir entregar la propiedad a la entidad o recomprarla.
Principales dudas
¿Cambia la hipoteca inversa la titularidad de la casa? ¿Pasa a ser de la entidad en el momento en el que se firma? Esta es una de las principales dudas que pueden surgir ante este producto, pero la respuesta es rotunda: no. Durante todo el tiempo que dure la hipoteca inversa, la casa seguirá a nombre de su propietario y no habrá cambios de titularidad a favor de terceros. El propietario no pierde su bien inmueble ya que es su garantía para recibir el préstamo con el que complementa su pensión.
¿Se puede cancelar?
En las condiciones de la hipoteca inversa se pueden acordar detalles como, por ejemplo, si el dinero se recibe en un sólo pago o si se percibe en ingresos periódicos con la cadencia que elija el titular -mensuales, trimestrales, etc…- o de forma vitalicia, que es la opción más recomendada. Y, por supuesto, siempre hay posibilidad de marcha atrás. Al igual que las hipotecas sobre vivienda habitual, las inversas también tienen derecho de cancelación que el beneficiario puede ejercer en cualquier momento.
Transparencia
Es muy importante que las entidades que ofrecen esta alternativa sean transparentes y ofrezcan a las personas interesadas una completa información, clara, accesible y muy sencilla. Se trata de una opción muy interesante, pero que no está exenta de cierta complejidad y que, además, está específicamente dirigida a los colectivos vulnerables.