Y mi deporte preferido es…..
Lo primero que debes hacer es elegir qué deporte vas a practicar. Y plantéate ante qué situaciones te puedes encontrar a la hora de practicarlo. No nos referimos a deportes de aventura, en los que los riesgos aumentan, sino a cualquier práctica deportiva; un simple pelotazo mientras se juega un partido de fútbol o un accidente en un gimnasio son sucesos habituales y pueden tener graves consecuencias.
¿Cómo puedo cubrir mis riesgos?
Algunas prácticas deportivas están cubiertas por ley, es el caso de las competiciones reguladas por federaciones, así como las carreras populares. Pagar la licencia federativa te da derecho a un seguro por accidente o lesión.
Si has decidido dedicarte a correr en competiciones automovilísticas, cazar, pescar o bucear, es obligatorio contar con un seguro específico. Pero si lo que vas a hacer, como la mayoría de los mortales, es ir al gimnasio que hay al lado de tu casa o de tu oficina o correr por el parque de tu barrio, lo más recomendable es disponer de un seguro de salud.
La mayoría de las aseguradoras ofrecen productos específicos para la práctica deportiva que incluyen atención medico deportiva completa, con reconocimientos y seguimiento del historial clínico del paciente, pruebas diagnósticas de resistencia y esfuerzo, y seguimiento nutricional. Y también pueden ofrecer coberturas para percibir una indemnización en caso de lesión, enfermedad u hospitalización.
No es una leyenda urbana
Puede parecerte exagerado que hablemos de riesgos en la práctica deportiva pero no lo es. A menudo suceden incidentes. Puede pasarte como a Rafa Nadal, que sufrió un pelotazo en el pecho en un partido en Wimbledon, por suerte sin consecuencias. Pero no hace falta ser un deportista de élite, las contracturas y tendinitis producidas en el gimnasio están a la orden del día.
Toma precauciones. Infórmate de los riesgos y de las coberturas que necesitas para practicar deporte tranquilo. Haz realidad tus propósitos de año nuevo, pero de forma segura.
