Nuevos clientes, nuevas demandas
Una nueva generación de clientes, totalmente integrados en la era digital, demanda nuevos productos aseguradores y nuevas formas de contratarlos. Definitivamente, entienden la tecnología como una herramienta y no como un fin: exigen una transformación digital que mejore su experiencia de cliente, su comodidad y las prestaciones que obtienen. Esta revolución afecta al negocio, a los productos, a los canales de distribución y a la propia realidad que las compañías aseguran.
Hablamos de algo que va más allá de contratar un seguro a través de un dispositivo móvil. La tecnología, por ejemplo, y más en concreto el uso del smartphone, ya está influyendo en la forma en que comunicamos un siniestro en el hogar o un accidente de coche: ubicación, fotos, compartir contacto con otros afectados o realizar un peritaje en remoto, es decir, transferir vídeos y fotografías del siniestro al perito, de manera que este pueda verificar y valorar los daños de manera no presencial desde su ordenador. En muchas plataformas web de empresas de seguros ya es habitual poder solicitar atención sanitaria o un vehículo de asistencia a través de una aplicación.
Las posibilidades de la geolocalización
La conectividad también está revolucionando estos servicios. Por ejemplo, con un dispositivo de geolocalización ubicado en nuestro vehículo y conectado con nuestro smartphone podríamos obtener información en caso de robo o pérdida de nuestro coche, moto o bicicleta. Incluso, en caso de accidente, el sistema podría detectar una desaceleración o una inclinación súbita que le podría llevar a notificar un accidente si el usuario no indicara lo contario.
Compartir nuestro rastro digital con la compañía aseguradora puede jugar a nuestro favor: a través de nuestros datos se podría evaluar la forma en que cada día usamos el coche, las rutas que elegimos, los horarios, nuestra forma de conducir, etc. La tecnología Big Data en este sector es clave ya que es capaz de detectar patrones: una compañía de seguros nos podría ofrecer coberturas personalizadas, evaluar nuestro comportamiento y nuestro riesgo o, incluso, abrir una ventana hacia la posibilidad del pago por uso, algo así como una póliza con un coste en función del tiempo real que conducimos.
El fenómeno Insurtech
Como ves, hay un mundo de posibilidades que la tecnología ofrece a este sector para personalizar mucho más su oferta y hacer que sus servicios sean más prácticos y cómodos. De hecho, el fenómeno Insurtech -las startups tecnológicas que están marcando la innovación en el sector asegurador-, ha penetrado incluso en el corazón de las grandes firmas del sector. Muchas de ellas han abierto espacios de colaboración con estas pequeñas iniciativas para aprovechar su creatividad e innovación a la hora de transformar servicios tradicionales.